En este post expongo cómo se puede corregir una mama tuberosa con un importante grado de malformación. En este grado la constricción tisular impide por completo el desarrollo de polos inferiores, interno y externo, delimitando una cincha alrededor de la areola. La glándula en su crecimiento sólo puede expandirse por la areola, de forma que ésta se ensancha y se hernia la glándula a su través. Es la típica imagen tubular que da nombre a esta malformación.

Su corrección es sólo quirúrgica y reitero, pues tengo muchas preguntas a través de este blog o por otras vías, a propósito de cómo hacer para evitar este tipo de crecimiento anómalo cuando en la adolescencia se empieza a observar, que no depende del tipo de sujetador que se use, no hay modo de evitarlo ni minimizarlo. Para corregirlo hay que esperar a completar el crecimiento mamario y corporal, y dado que no es una cirugía precisamente simple (no en la mayoría de los casos) necesitamos cierto grado de madurez también emocional de la paciente.

Más aclaraciones (de nuevo): tener una mama tuberosa no afecta a la función de la mama, como es la lactancia, mientras que la cirugía sí que podría dificultar o impedir la lactancia tras ella. No es una patología, por lo que sólo se corrige para mejorar su aspecto, para darle un aspecto normal, pero no es imprescindible operar. De hecho, hay muchas mujeres con grados mínimos de mama tuberosa que no tienen ningún problema con la forma de su pecho, no siendo esto sino una forma más de la mama.

mamas tuberosas

Se marca la piel que hay que quitar alrededor de la aerola y las dimensiones del bolsillo para la prótesis. También se señala el surco submamario original de la paciente, a 2 cm. escasos del borde inferior de la aerola.

Vivimos una época muy perfeccionista y muy obsesionada con el aspecto del seno femenino, pero hay montones de obras de arte y fotografías donde se retrata o reproduce a modelos que el artista o los espectadores consideraban muy bellas, ellas o sus cuerpos, y tienen diferentes grados de mama tuberosa. Es sólo una forma más, y sólo se convierte en una necesidad (psíquica, es decir, de salud psíquica) cuando la desviación de la normalidad es tan grande que ya es una auténtica malformación, difícilmente asumible por las mujeres que la tienen.

Sin más, estas chicas en la consulta nos refieren que tienen el pecho muy raro, que nunca les gustó su forma, que les acompleja mucho porque ninguna de sus amigas lo tiene así, que tienen las areolas muy grandes y muy raras. Es mucho más que un pecho pequeño.

La corrección, que ya he explicado en otros post y en la web, debe asociar al implante mamario, siempre anatómico, de altura media o baja y de proyección moderada- alta a alta o muy alta, diferentes plastias en la glándula y en la areola.

Hay diferentes técnicas, pero para un caso como el de este post es imprescindible :

mastopexia periareolar, para reducir el diámetro de las areolas, corregir su herniación y posicionarlas a una posición adecuada;

colgajos glandulares, como el colgajo de Pukett o alguna técnica de “unfolding” que expanda y despliegue la glándula constreñida por la cincha subareolar, y así la abran y repartan el tejido también a los polos inferiores. En estos casos la glándula debe despegarse ampliamente , por la vía periareolar.

-implante anatómico, en plano subglandular o subpectoral según el grosor del panículo en el polo superior, edad de la paciente, presencia o no de patología (benigna) mamaria. Estos implantes difícilmente podrán ser muy voluminosos pues los tejidos en estas pacientes son muy tensos, poco distensibles, y no se adaptan bien a volúmenes excesivos (en realidad nunca, pero aquí muchísimo menos).

Mamas tuberosas

Mamas tuberosas

Mamas tuberosasEn este caso la paciente presentaba además una asimetría en ptosis y volumen, pero también torácica por escoliosis. En ella se puso una prótesis de mayor proyección (y entonces mayor volumen) en la mama izquierda y un diseño de mastopexia diferente, pero siempre periareolar. Es evidente también en qué medida esta paciente tenía complejo por su malformación mamaria, adoptando una postura corporal como ocultando su pecho, de forma totalmente inconsciente, del mismo modo que, inconscientemente también, corrigió notablemente su postura a los pocos meses de la cirugía.

El postoperatorio es siempre más lento por su mayor complejidad, aunque no más doloroso. Es imprescindible seguir muy de cerca las instrucciones del cirujano.

Puedes leer más información sobre mamas tuberosas en mi web.

Espero que os ayude a llevar mejor el post operatorio.

Quedo a vuestra disposición pero NO ATENDERÉ NI ON LINE NI POR TELÉFONO CONSULTAS SOBRE:

  • Intervenciones realizadas por otros especialistas
  • Ni aquellas que exijan una valoración del paciente en persona.

Gracias por vuestra comprensión.