La evolución del rostro de las Hermanas Brown

La serie fotográfica de Las Hermanas Brown nació de la mano del fotógrafo Nicholas Nixon, que realizó, entre 1975 y 2010, una serie de 35 fotografías a su esposa, Bebe Brown, de 25 años, y a sus tres hermanas , la más joven de 15 años. La primera foto, realizada de forma casual, les gustó tanto que acordaron repetirla cada vez que se reunieran, así hasta 2010, fecha de la última.

Aunque no se les dieron instrucciones de ningun tipo, tan sólo el orden en que aparecían las cuatro, a fin de poder compararlas, es sorprendente su naturalidad, en un interesantísimo testimonio gráfico de los cambios del rostro con la edad y de la misma vida. Las hermanas Brown son cuatro chicas muy atractivas que aceptaron exponerse ante la cámara, sin maquillaje y sin ningún tipo de intervención estética, permitiendo compararlas y sobre todo ver su evolución con los años, de aquí lo interesante de su análisis.

Mi objetivo en este post es simplemente exponerlas para quien no las conozca. Vemos cómo los cambios faciales no siguen el mismo ritmo para todos aunque por supuesto llegan, cómo algunos rostros enseguida muestran flacidez y caída de los pómulos y mejillas y como otros en cambio apenas caen pero sí sufren la aparición precoz de arrugas o pliegues, debido a importantes pérdidas de volumen.

Se puede apreciar cómo, tal como relaté en otros post, es el tercio interno o central de la cara el primero en acusar cambios, con la aparición de ojeras y surcos nasoyugales. Más tardía es la caída o descolgamiento de la grasa de la mejilla y el ” jowl” mandibular y aún más tarde tendremos los cambios en el cuello, siendo éstos últimos ( jowl y bandas con flacidez cervical) los que más marcan la edad.

Aquí muestro un esquema, muy simple, de los cambios faciales con la edad. Un rostro joven muestra un párpado inferior de poca altura vertical, corto, un contorno orbitario lleno, un pómulo con su bolsa grasa elevado, una mejilla de contorno suave, los surcos nasogenianos apenas marcados, la línea del contorno mandibular nítida y un cuello con un ángulo definido, no obtuso. Un rostro envejecido muestra ojeras, hundimiento del contorno orbitario, pliegues nasoyugales y nasogenianos profundos, la grasa del pómulo descendida, aumentando la longitud vertical del párpado inferior, y la grasa de la mejilla protruyendo sobre el reborde mandibular ( jowl mandibular).

En las imágenes de las hermanas Brown podemos observar que las que tienen cerca de los treinta hasta casi cuarenta, ya empiezan a marcarse las ojeras, en mayor o menor grado, así como a profundizarse los surcos nasogenianos (1/3 interno de la cara!). Vemos también que empieza a bajar la cola de la ceja. En las fotos de la década siguiente se objetiva el descenso de la grasa del pómulo haciendo que aumente la longitud vertical del párpado inferior, el contorno periorbitario se ve más hundido, así como las ojeras, los surcos nasoyugales…Las mejillas, al ir cayendo, empiezan a marcar la bolsa o jowl mandibular. Aparecen las arrugas de expresión, como las del entrecejo.

En la siguiente década los párpados inferiores muestran bolsas, el superior cae lateralmente y la cola de la ceja se ve muy caída. La punta nasal se va ensanchando y cayendo un poco. El labio superior se alarga y adelgaza y las comisuras se marcan y caen. El jowl es evidente así como los cambios del cuello.

Aún siendo muy parecidas, vemos cómo el proceso de envejecimiento es variable entre cada una de las hermanas Brown y hay factores que influyen, aparte de la edad, como el tipo de piel o los cambios ponderales.