Este es un nuevo caso de reducción mamaria. Incluso tamaños “no tan exagerados” se benefician enormemente de esta cirugía. Os cuento en qué consistió a continuación:

Mi paciente tenía unas mamas densas y pesadas, además de una anchura muy desproporcionada para su cuerpo, delgado y en un peso adecuado. Ella quería un pecho lo más pequeño que yo encontrara proporcionado, idealmente una copa B y, por supuesto, que pudiéramos corregir también su asimetría.

¿Cómo lo solucionamos? Optamos por una mamoplastia de reducción que le supuso bajar dos tallas de sujetador y, por tanto, que pudiera cambiar muchos de los hábitos que había implantado en su vida por culpa de un pecho excesivo.

La diferencia en el peso que tenía que soportar, el abandonar los sujetadores especiales, poder hacer su trabajo habitual que le exige mucha actividad, armonizar su imagen corporal, poder hacer deporte de intensidad, facilitar el seguimiento de la patología en las mamografías. Al final, es la vida de la paciente la que mejoramos con estas cirugías.

Mostramos resultados estables ya a seis meses de la operación, donde podemos ver su pecho de copa B simétrico y en perfecta proporción con su cuerpo.

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Quedo a vuestra disposición pero NO ATENDERÉ NI ON LINE NI POR TELÉFONO CONSULTAS SOBRE:

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Gracias por vuestra comprensión.