Este es un asunto que hace tiempo me ronda para comentarlo. Vamos a ver, hasta hace unos, digamos, veinte años, lo habitual en una consulta privada de un cirujano plástico era, como en la consulta de cualquier médico en un ámbito privado (es obvio que no estamos hablando de la Seguridad Social), que a cambio del tiempo y la atención del médico se derivaran unos honorarios.

Esto es algo normal ya que para atender a un paciente un médico debe haber estudiado una carrera, luego pasar otros tantos años haciendo una especialidad, formarse en lo que precisara para completar sus conocimientos o técnicas, costeándose él mismo una formación continuada para estar actualizado, por no hablar de mantener los salarios de su personal en la consulta, y de la equipación y el mantenimiento de la consulta.. Hasta hace un par de décadas nadie se planteaba que no fuera así, pues el médico te ve y te atiende, realiza un servicio especializado, muy especializado, y te dedica un tiempo de su trabajo solo para ti y para atender tu consulta.

Recuerdo que esto empezó a cambiar cuando algunas corporaciones, con un fin muy mercantilista, fueron apareciendo captando pacientes con una publicidad agresiva , poniendo todo como muy fácil, con vistas a generar un negocio a partir de la cirugía estética, en plan producto de consumo, (ya os expliqué en este post que la cirugía plástica no es un artículo de consumo) con múltiples reclamos, entre ellos el de ofertar consulta gratuita con el cirujano. Solo que la mayoría de las veces no era un cirujano quien veía al paciente sino un comercial bien entrenado que banalizaba y simplificaba al máximo las diferentes intervenciones, y luego una vez confirmada la captación del paciente les veía el cirujano. Y así empezó todo y ahí quedó lo de la consulta gratuita como reclamo.

Y con ello la percepción de que las cirugías se pueden meter todas en el mismo paquete y ofertar precios generalizados, como si todos los aumentos mamarios fueran iguales, o todas las liposucciones, y así con todo. Y la banalización del tiempo del cirujano para hacer una exploración y diagnóstico al paciente. En relación a esto, os recuerdo este post en el que os explico por qué no podemos dar precios por teléfono.

Esto ha ido generalizándose, creando como una especie de competencia entre cirujanos, los que siguen estableciendo honorarios por su tiempo y conocimientos en la consulta, y quienes optan por no hacerlo, en la idea de facilitar el acceso de pacientes. Y se ha generalizado hasta el punto de que hay un importante sector de la población que opina que es justo pagar a un otorrino, a un ginecólogo ó a un traumatólogo por atenderte en una consulta privada, pero no a un cirujano plástico, vete a saber por qué. Y no solo les extraña que se les informe cuando el cirujano al que desean ver (ojo, los pacientes acuden voluntariamente a nuestras consultas, son los pacientes quienes deciden venir) les comunica, generalmente su personal cuando conciertan la cita, que ese tiempo supone el pago de unos honorarios, no solo les extraña sino que a muchos les enoja o indigna, tachándonos (algunos) de abusones o aprovechados, qué ocurrencia pretender cobrar, un cirujano plástico… O se nos insulta en redes, o se lo hacen pasar fatal a nuestro personal. Como si obligáramos a ningún paciente a venir.

Veamos, los pacientes no tienen DERECHO a una consulta gratuita, los cirujanos en las consultas privadas no tienen el DEBER de atender de forma gratuita a los pacientes que nos soliciten, libremente, consulta. El cobrar o no honorarios es decisión exclusiva del cirujano, podemos cobrar o no, o decidir no percibir honorarios si el paciente concierta una cirugía, o si lo conocemos o es amigo de algún paciente o de alguien de nuestra clínica, o descontarle la consulta de los honorarios de la cirugía, lo que queramos los cirujanos, pero es ELECCIÓN del cirujano, no una OBLIGACIÓN. No estamos obligados a atender así a los pacientes, la consulta gratuita no es un derecho del paciente, es una libre opción del cirujano si así lo desea.

Una queja muy común ante la extrañeza de su no gratuidad es que “no les hacemos nada ese día” o que “solo querían consultar presupuesto”. En fin, les aseguramos que los cirujanos plásticos no vivimos de las consultas, esto nos supone muy poco, de verdad. Os lo explico por partes:

  • “No les hacemos nada ese día”. Bueno, para empezar alguien que no tenga el título de cirujano plástico no sabe hacerles como es debido  esa exploración. Hay que tener los conocimientos para hacerles la valoración. Les hacemos una historia clínica, les exploramos, les medimos, les hacemos un diagnóstico, les explicamos el tratamiento, en qué consiste, los pros y contras. Les sorprendería la de veces que estamos “sin hacerles nada” unos 45-60 minutos…
  • “Solo deseo saber presupuesto”. Pues para hacer un presupuesto precisamos todo lo explicado en el párrafo anterior, tenemos que saber qué necesita exactamente el paciente y para eso tenemos que hacer el diagnóstico.

Y si no nos supone apenas nada las consultas (porque nos mantenemos de las cirugías y de los tratamientos que podamos hacer en la clínica), ¿por qué las cobramos?

Para empezar, porque son actos médicos, que solo podemos hacer porque nos hemos formado en una difícil especialidad y hemos invertido mucho en esa formación. 

Para seguir, ese tiempo que se les dedica se puede utilizar para atender a otro paciente, o para realizar cualquier otro trabajo o actividad, pero para nosotros atender una consulta , por más que de verdad nos encanta lo que hacemos, es una actividad laboral, es tiempo de trabajo.

Y para terminar, hemos visto que la práctica de ofertar consulta gratuita ha acarreado un muy escaso respeto hacia el tiempo de los cirujanos, de tal forma que hay mucha gente que la banaliza y ni se digna a llamar para anular o, mas fácil aún, simplemente decir que no van a acudir cuando nuestro personal les llame para confirmar agenda. 

Por ello entendemos que establecer unos honorarios por nuestro trabajo al hacer una primera consulta es una forma de respetarnos y hacer valer que nuestro tiempo y nuestro trabajo cuenta, y realmente seleccionamos así a quien de verdad tiene interés en que le hagamos un diagnóstico y posibles soluciones, a diferencia de quien pide consulta en tres sitios al mismo tiempo valorando bien poco el tiempo de cada uno de esos cirujanos. 

No pretendemos lucrarnos ni aprovecharnos de los pacientes, queremos atenderos como merecéis y como estimamos que debe hacerse, y es una premisa esencial que nos sintamos respetados, valorados en nuestro trabajo, en nuestro conocimiento y en nuestro tiempo de dedicación a vosotros.

POST RELACIONADOS:

Quedo a vuestra disposición pero NO ATENDERÉ NI ON LINE NI POR TELÉFONO CONSULTAS SOBRE:

  • Intervenciones realizadas por otros especialistas
  • Ni aquellas que exijan una valoración del paciente en persona.

Gracias por vuestra comprensión.