Caso clínico: Lipoabdominoplastia

Este es un nuevo caso de lipoabdominoplastia.

Todos sabemos y, si no, aprovecho para recalcarlo una vez más, que la abdominoplastia no es una cirugía para adelgazar. En realidad, ninguna lo es, tampoco la liposucción,  pues la cirugía es para definir, remodelar, contornear, en tanto que para adelgazar no hay otro sistema que perder peso adaptando la nutrición y la actividad física a las necesidades de cada uno.

¿Cómo se plantea una abdominoplastia?

Siempre hacemos liposucción cuando se realiza una abdominoplastia, pero esta liposucción nunca puede ser muy extensa, pues estamos tratando tejidos que después se van a despegar y tensar, especialmente, la parte central, supraumbilical, pero también los lados. Por ello, es imprescindible que las pacientes estén en un peso normal y, de precisar perder peso, deben hacerlo antes.

Por otro lado, deseo recordar que en el abdomen tenemos depósitos de grasa extra, e intracavitaria o visceral. La extravisceral puede ser tratada, en mayor o menor cuantía según cada caso, mediante liposucción, pero la visceral o interna solo se reduce perdiendo peso, imposible con cirugía.

Una paciente con mucha grasa visceral nunca será candidata a una cirugía. Este es el problema de muchos hombres, que suelen tener más distribución visceral y, por ello, no podemos tratarlos con cirugía ni liposucción ni abdominoplastia, al tener una mayoría de grasa intracavitaria.

El caso de hoy

Aclarado este punto, ya puedo explicar este caso de abdominoplastia. Mi paciente estaba en un peso normal, tenía depósitos de grasa no excesivos externos, exceso de piel y una diástasis importante tras tres embarazos. Era una excelente candidata para una abdominoplastia y con la ventaja, además, de tener una buena piel, elástica y con buen tono.

Ella estaba muy motivada e incluso perdió algo de peso antes de la cirugía, comprometiéndose a una buena rutina de cuidado de su alimentación y práctica deportiva, lo que es del todo imprescindible para mantener resultados. Nunca es operarse y olvidarse: hay que seguir cuidándose.

Realizamos una técnica de lipoabdominoplastia, con liposucción de 1100 cc de grasa en abdomen y costados, una plicatura de aponeurosis de rectos de unos 8 cm para corregir una diastasis de casi 4 cm y una hernia umbilical diastásica. Se resecó el tejido infraumbilical, que pesó unos 800 gr.

Mostramos el resultado a 1 año de la cirugía.

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